Las “Purgas” hacen parte de la metodología del grupo de terapias de la OIDA Terapia y su esencia es la de posibilitar un profundo autoconocimiento personal y posibilitar la sanación de la existencia tanto física, mental, intelectual, como a nivel del alma y la espiritualidad. Se requiere una actitud sincera, ya que se trata de una invitación a descubrir un tremendo tesoro que va más allá de cómo nos han presentado la realidad, para llevarnos a la grandeza de las profundas verdades de nuestra existencia.
Las purgas de la OIDA Terapia toman como base el estado de condicionamiento y contaminación que la persona ha tenido en su vida, indicando proporcionalmente la medida de qué tipo de “purgas” se necesitan para debilitar las influencias negativas y sanar las condiciones desfavorables. Las “purgas” contienen una lista de aspectos a sanar y definen la influencia que estos tienen sobre la conducta humana y la responsabilidad de las erróneas decisiones y concepciones guardadas en la mente, como por ejemplo la violencia ejercida con los animales. Por ello este sistema cuestiona y confronta la cultura y los modelos de crianza, que son la principal fuente de las contaminaciones del hombre actual, ya que, sin conocer la causa de una enfermedad, difícilmente se eliminan los síntomas.
La purga, además de una profunda toma de conciencia del mundo en que vivimos, trabaja fortaleciendo el mundo de la fe, ya que hay mucha compresión y mucha generosidad, como también hay una cristalina visión para que la misma fe sea fortalecida y así luchar contra todas aquellas condiciones de fe insanas que se han incorporado en nuestras mentalidades.
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